Disfruta del verano en Salamanca

Dado que Salamanca  es la ciudad universitaria por excelencia uno estaría tentado de pensar que durante los meses de vacaciones la actividad se reduce al mínimo, sin embargo no es así. Bien es verdad que la ciudad se vuelve más tranquila, pero la ciudad no queda ni mucho menos a merced de la soledad. De hecho es muy probable que encontréis numerosos turistas, eso sí, de origen español, dispuestos a pasar un buen rato conociendo todas sus posibilidades.

Actividades culturales y festivales de verano

Algunas de las actividades más interesantes precisamente tienen lugar en los colegios mayores universitarios. Son especialmente destacables las que tienen lugar en el Colegio del Arzobispo Fonseca. Este colegio, fundado en 1519, acoge este año desde monólogos teatrales  como “Misterios del Quijote” a cargo del prestigioso actor Rafael Álvarez “El Brujo”, versiones de obras de Shakespeare como Hamlet o Ricardo III, y como plato fuerte la representación de “El cerco de Numancia”, obra teatral de Miguel de Cervantes.

La oferta cultural se extiende a las comarcas cercanas. Si estáis en Salamanca el 15 y 16 de julio podréis disfrutar del festival de Blues de Béjar  (a apenas una hora en autobús); un festival en el que el blues más auténtico y las voces más personales son protagonistas, ¿habéis oído hablar de Shemekia Copeland o Lurrie Bell? Si es así no faltéis  a la cita; y si no les conocéis ahora es el momento para descubrirlos.

Otro importante festival muy cercano a Salamanca es el teatral que se organiza en Ciudad Rodrigo (también a aproximadamente una hora en autobús).  Del 23 al 27 de agosto podréis ver montajes vanguardistas, cuentacuentos tradicionales, representaciones de marionetas, teatro clásico…

Darse un baño en las piscinas de Salamanca

Con tanto trasiego cultural a uno le apetece sencillamente tener unas horas de relax y, con el calor, de refrescarse. ¿Y dónde mejor que en una de las piscinas municipales de la ciudad? Las piscinas de Salamanca este año han unificado sus horarios y abren del 11 de julio al 11 de septiembre de 11:00 a 21:00 horas. Si queréis pasar un día entero os bastará con pagar apenas 3,56€. Una de las más recomendadas es la piscina municipal Garrido, rodeada de vegetación y que está muy bien comunicada con el centro de la ciudad.

Pero si queréis algo diferente también podéis probar alguna de las 5 piscinas naturales de la comarca, como la de Rio Frío (en Villasrubias, a una hora de la ciudad); o las Batuecas (a una hora y veinte minutos de la ciudad).

Los bares más típicos y los pubs más modernos

No hay que olvidar que allá donde allá estudiantes hay numerosos cafés, pubs y locales. La oferta es amplísima y hay para todos los gustos. La mayor actividad se concentra en torno al centro y en las calles Bordadores, Gran Vía y Varillas; así que no tienen pérdida y son fácilmente accesibles. Quizá el más conocido es Gatsby (Bordadores, 16) con su gran variedad a precios accesibles, igualmente ocurre con el medieval Camelot ; muy recomendable es también el elegante Birdland (Azafranal, 57); pero si buscáis un toque de distinción tenéis que probar las especialidades de The Doctor Cocktail (Doctor Piñuela, 5); de hecho su barman ha sido finalista en concursos internacionales.

Caminar y descubrir misterios de Salamanca

Salamanca es una ciudad con mucha, muchísimas historia. Así que algo tan cotidiano como una caminata puede depararnos grandes sorpresas. No os vamos a hablar de sitios tan conocidos como La Catedral, la Plaza Mayor o la Casa de las conchas; sino de lugares menos conocidos. Por ejemplo, ¿sabéis que en la Plaza del Corrillo hay capitales con motivos astronómicos y mitológicos que nadie sabe cómo llegaron hasta allí?, ¿o que en el patio de las Escuelas Menores hay una representación medieval del cielo de lo más misteriosa? Por no hablar de la cueva de Salamanca, donde se dice que el diablo daba clases a unos pocos estudiantes seleccionados.

Salamanca es una ciudad sorprendente, donde lo antiguo, lo moderno, lo “cool” y lo tradicional se encuentran para darnos un verano inolvidable. Si no habéis venido, ¿a qué esperáis?