Cómo pasar el mejor Gap Year

Por Antonio Morales el 12 de mayo de 2016

Con Malia Obama tomándose un año sabático entre sus estudios en el instituto y Harvard, la expresión “gap year” ha estado rondando los medios recientemente. Pero, ¿qué es un gap year y cómo le puedes sacar ventaja?

Simplemente un gap year es un año que se pasa entre la finalización de los estudios en el instituto y la llegada a la universidad para, básicamente, no hacer nada. Algunos eligen ganar experiencia laboral  y ahorrar para pagarse los estudios, otros eligen viajar por alrededor del mundo, y hay otras modos de pasarlo entre estos dos extremos. Para obtener el máximo rendimiento de un gap year, muchos expertos recomiendan estructurar el año, tener un objetivo claro y tener las cosas muy, muy claras. Empleados de una manera sabia, estos años sabáticos pueden ser una grata experiencia de aprendizaje y crecimiento, un tiempo para experimentar lo que es el mundo y vivir algo completamente diferente a lo que se viviría si se pasara directamente del instituto a la universidad.

¡Echa un vistazo a algunas de las maneras más recomendables de pasar un gap yer! ¡Te inspirarán!

Aprende una nueva habilidad:

Una de las mejores maneras de emplear tu año sabático es aprender una nueva habilidad. Puedes aprender a navegar, aprender español… Por supuesto esto sonará un tanto “parcial”, pero aprender español en un país extranjero (siempre allá donde se habla) es una experiencias más potentes que puedes vivir para abandonar tu zona de confort y valerte por ti mismo. Es una manera de vivir todo un nuevo mundo y tener nuevos puntos de vista. Por no mencionar que aprender un nuevo idiomas como el español es una habilidad importante de cara a tener éxito tanto en la universidad al volver de un año sabático como en el mundo tras abandonar la facultad. Aprender una nueva habilidad, no importa cuál elijas, cambiará tu vida a mejor.

Voluntariado:

El voluntariado es un poderoso modo, no sólo de ayudar a los demás, mejorar tus habilidades o aprender en un entorno práctico, también es la manera perfecta de experimentar nuevas culturas y maneras de vivir que no podrías apreciar de otra manera. Mucha gente elige hacer un gap year para conocer el mundo real, algo que no es posible  si se sigue el camino que va directamente del instituto a la universidad. Un voluntario en el extranjero, además, es una estupenda manera de sentirse útil durante un gap year y aprender mucho sobre lo que realmente es el mundo de mano de nueva gente y conociendo nuevos entornos.

Hacer prácticas en el extranjero.

Hacer prácticas es una buena manera de rodearte de personas de diversos orígenes y bagajes (especialmente si haces prácticas en el extranjero, ¡tendrás unos cimientos doblemente reforzados para tu carrera!). No es solamente una buenísima manera de ganar experiencia laboral, también es una gran oportunidad para salir de ese mundo en el que los profesores lo dan todo hecho y entrar en el mundo laboral de una manera que te enseñará a ser independiente, tomar buenas decisiones y expresarte por ti mismo.  Añade unas prácticas completas en el extranjero y un nuevo lenguaje a tu experiencia y ganarás el triple cuando llegues a casa.

Por supuesto hay mucha gente que creen que tomarse un año sabático es algo reservado a aquella gente privilegiada.  Sin embargo, hay muchas maneras de explorar el mundo aunque no se tenga una cartera llena a rebosar. Muchas universidades ofrecen un becas para hacer un gap year viajando por el extranjero o para comenzar los estudios tras terminar el año sabático. La American Gap Association también hace un gran trabajo recopilando becas y ayuda financiera para aquellos alumnos de Estados unidos que buscan financiación para su tiempo de descubrimiento.

Por supuesto esto no es algo que sólo decimos nosotros. De acuerdo a un estudiado realizado entre estudiantes estadounidenses que han hecho un gap year en 2015, los denominados “gappers” han tenido mejores calificaciones en sus universidades, han terminado sus estudios en menos tiempos y se sienten más satisfechos con su carrera laboral que aquellos que no lo han disfrutado. Tomarse un tiempo sabático, ya sea un año o un semestre… o incluso más que un año antes de empezar la universidad es la manera perfecta para cargar las pilas, crecer como persona y experimentar lo que realmente es el mundo.