Cómo disfrutar de un desayuno típicamente español
España es una mezcla de distintas culturas y eso se puede ver desde primera hora del día en el desayuno. Dependiendo del punto del país donde te encuentres verás que las personas toman un desayuno y otro.
Normalmente, la distinción viene en la comida, para beber se suele encontrar lo mismo: café, infusiones, cacao, chocolate, leche sola, zumos… Cualquier cosa que pidas estará disponible en todos los bares. Con el acompañamiento de las bebidas suele venir la diferencia. En las casas suele tomarse galletas o tostadas de pan untadas con lo que se desee, pero en los bares hay mucha variedad.
En Madrid lo habitual es tomar un pastel dulce o tostadas con mantequilla y mermelada de frutas. Pero si hay un desayuno más típico son los churros o las porras. Aunque se preparan en todo el país, los madrileños son muy típicos. En cambio, en Barcelona el desayuno típico es el pa amb tomàquet –pan con tomate-, que consiste en un pan tostado sobre el que se esparce el jugo de un tomate maduro. También se le echa aceite, sal y, quien quiera, un poco de ajo para darle sabor.
En Andalucía el desayuno típico consiste en tostadas de pan a las que se añade lo que cada uno pida. En todos los bares hay gran variedad de ingredientes. Se pueden pedir solo con aceite y sal, tomate, jamón serrano, mantequilla y mermelada, queso… Hay tantas posibilidades como gustos tenga el cliente.
En cambio, en el norte es distinto. En el País Vasco el desayuno típico son los pintxos –raciones- de tortilla. Es un desayuno más pesado que en el sur. En los bares se pueden encontrar distintos tipos de tortilla: con cebolla o sin ella, con queso, champiñones... Hay mucha competitividad con las tortillas de los bares: las mejores atraen a mucha clientela.
Como podéis comprobar, no hay un desayuno típico español, hay muchos desayunos típicos.