Dicho español: gato con guantes no caza ratones
Además de los refranes acerca de épocas del año o de carácter agrícola, en España abundan aquellos que tienen como protagonistas a animales. A menudo estos se humanizan y nos muestran una enseñanza. Este es un buen ejemplo.
El gato siempre ha sido tenido por un animal astuto y hábil. ¿Por qué de repente aparece como un ser torpe, incapaz de cazar un ratón? Los guantes pasan a ser un elegante complemento a un impedimento para llevar a cabo una labor.
Puede parecer algo lógico: cuando procedemos a realizar una tarea debemos hacerlo con los medios adecuados y sin nada que nos entorpezca. Pero, ¿quién no ha malgastado su tiempo tratando de solucionar un problema por la vía difícil cuando existía un método más simple para arreglar las cosas?
Este refrán nos recuerda, indirectamente, que también hay que atajar los problemas de manera directa, prácticamente “a mano desnuda” y que cualquier artificio a la hora de solucionarlos puede hacernos la teoría penosa y difícil. ¿Para qué queremos ponernos guantes para cazar ratones si debajo tenemos zarpas?