El Museo Cortijo Miraflores es un pequeño centro cultural muy activo y versátil ubicado en una casa que hace siglos fue una finca señorial. Acoge todo tipo de eventos culturales durante el año, desde lecturas a conciertos, conferencias y exposiciones.
El edificio original lo construyó Don Tomás Francisco Domínguez y Godoy en 1706 como una parte de su finca, que también tenía molinos de aceite y azúcar. El edificio sufrió numerosas reformas a lo largo del tiempo, como la expansión de la casa y la creación de unos jardines en 1756. Tanto el edificio como sus jardines adoptaron el aspecto que tienen hoy en día en el siglo XIX, que también fue el momento en el que la finca comenzó a ser conocida como el Cortijo de Miraflores.
Se abandonó durante años y se deterioró, pero se renovó y adaptó para su uso museístico, que incluiría espacios tanto para exposiciones como para otras actividades culturales. En una de las habitaciones del museo se puede ver el antiguo molino de aceite y conocer el proceso tradicional de extracción de aceite de las olivas.