Miguel de Unamuno
Miguel de Unamuno, un hombre de carácter que trabajó en la Universidad de Salamanca. Fue famoso su enfrentamiento con el General Millán Astray; mientras otros permanecían en silencio, a él se le atribuye decir "En ocasiones quedarse callado es mentir. Ganaréis porque tenéis más fuerza bruta. Pero no convenceréis. Pues para convencer hay que ser persuasivo. Y para ser persuasivo necesitaríais lo que no tenéis: razón y derecho." - Confrontación el 12 de octubre de 1936
Biografía de Miguel de Unamuno
Miguel de Unamuno nació en la ciudad de Bilbao, al norte de España, en 1864. Se marchó a estudiar a Madrid, donde cursó Filosofía y Letras de 1880 a 1884, para ser profesor de griego. Tras obtener su doctorado comenzó a trabajar en la Universidad de Salamanca, de la que llegaría a ser rector y profesor de Historia del español. En la segunda mitad de la década de 1880, Unamuno trabajó como profesor antes de decidir trabajar por Europa. En 1891 se casó con Concha Lizárraga, con la que tuvo 9 hijos.
Cuando estaba en España se involucró mucho en la vida política y cultural de Salamanca; se convirtió en un rostro habitual en las tertulias literarias, así como en los grupos socialistas. Más adelante, en 1914, le expulsaron del puesto de rector de la universidad por motivos políticos, llevando a Miguel de Unamuno a convertirse en una especie de mártir del movimiento político liberal. Como es de suponer, fue bastante franco sobre sus opiniones y creencias, criticando el mandato del General Miguel Primo de Rivera y de los falangistas de Francisco Franco. Esto le llevó a ser exiliado en Fuerteventura en 1924, antes de decidir trasladarse a Francia.
Tras la caída de la dictadura de Primo de Rivera, Unamuno comienza a involucrarse en la política republicana, y vuelve a Salamanca para proclamarla ciudad libre de la dictadura, y le es restaurado el puesto de rector en la Universidad de Salamanca en 1935. La Guerra Civil española comienza el año siguiente, y en un principio Unamuno apoya a los rebeldes. Sin embargo, cuando aquellos con los que simpatiza comienzan a apresar a muchos de sus amigos para matarles o encerrarles, se arrepiente rápidamente de su decisión, e intenta -sin éxito- hablar con el dictador para ayudar a sus amigos.
Más adelante, Miguel de Unamuno declara que ya no apoya el régimen fascista y la dictadura de franco, por lo que le vuelven a retirar el cargo de rector y sufre un arresto domiciliario desde octubre de 1936 hasta su muerte en diciembre de ese mismo año a los 72 años.
Estilo y obras
A Unamuno le gustaba llevar al límite sus habilidades. así como las fronteras literarias, y siempre se propuso ser el mejor en todo lo que hacía y escribía. Cada vez que escribía una obra, quería que fuese la mejor. Por lo tanto sus obras de teatro debían ser las mejores obras expresionistas del momento, sus nivolas un género más prestigioso que las novelas, sus ensayos muy personales, y su poesía insuperable. Sin embargo, a veces se daba el caso de que el hombre hacía sombra a su obra. Por ejemplo, muchos de sus contemporáneos no eran muy devotos de su obra, en especial de su poesía, pero admitían que tenía una personalidad única e interesante.
En términos de estilo literario, sus característica más marcada es que intentaba escribir de una forma que imitase el lenguaje hablado. Aunque no le gustaba echar mano de la retórica, Miguel de Unamuno tenía una sintaxis rica y elaborada con un gran mezcla de vocabulario que iba desde el registro elevado y prestigioso a palabras y frases del lenguaje diario. Los críticos suelen comentar que su estilo literario era el resultado de que hablase castellano como segunda lengua, pues el idioma de su madre era el vasco. Su uso de las palabras es por esto un poco extraño y misterioso para un hablante nativo de español.
Tenía un amplio abanico de habilidades, pero era más conocido por sus novelas que por su poesía. Una obra destacada es Del sentimiento trágico de la vida en los hombres y en los pueblos. Otras piezas interesantes incluyen Amor y Pedagogía, y Abel Sánchez: una Historia de Pasión (la historia de Caín y Abel, los hijos de Adán y Eva), que narra el primer asesinato de la historia y es una lectura muy interesante.
Obras destacadas de Unamuno
- Del sentimiento trágico de la vida en los hombres y en los pueblos
- Amor y pedagogía
- San Manuel Bueno, mártir
- Abel Sánchez: una historia de pasión
- El Cristo de Velázquez